Conoce los beneficios de la meditación

Por Alejandro Martinez Notte

Meditación, mujer

La meditación es una poderosa herramienta que podemos utilizar para contribuir a nuestro bienestar general. Entre otras cosas, nos ayuda a bajar el estrés y a conectarnos con el momento presente disminuyendo la ansiedad.

Creo que el término meditación ya no es un concepto tan lejano. En los últimos años, se habla cada vez más del tema e incluso se recomienda mucho su práctica.

Es probable que esto tenga que ver con los niveles de estrés y ansiedad que soportamos en la actualidad la mayoría de los que vivimos en ciudades o con ritmos de vida demasiado acelerados y en muchas ocasiones, excesivamente productivos.

Quiero compartirte información sobre esta práctica y sus efectos positivos en nuestro cuerpo porque pienso que es una forma accesible de conectar con nosotros mismos y de ayudarnos a transitar ciertos momentos.

¿En qué consiste la meditación?

Seguramente tu primera impresión de este término te haya llevado a imaginarte a una persona en posición de loto, repitiendo el mantra OM, con la mente en blanco y quizás levitando a unos centímetros del suelo.

Si esta sigue siendo tu idea de la meditación, estás en el lugar correcto porque vamos a desmitificar estas creencias que lo único que hacen es alejar de las personas una herramienta maravillosa y muy contributiva para nuestro bienestar.

Según la Real Academia Española, meditar es «pensar atenta y detenidamente sobre algo». Esto quiere decir que eliminamos de un tirón esto de la mente en blanco.

Si bien no es necesario pensar en algo en particular cuando meditamos, ya que la meditación es una práctica de autocontrol para regular nuestro cuerpo y nuestra mente, es demasiado exigente llegar al no pensar. Nos remitimos al funcionamiento de nuestro cerebro, generalmente habrá pensamientos que van a intervenir en ese momento y que tratarán de interrumpir el proceso porque se volverá algo incómodo.

Sin embargo, nuestra tarea al momento de la meditación será la de dejarlos pasar y no luchar contra esos recuerdos o esas ideas que se empiezan a colar. Es probable que cuando intentes meditar, cierres los ojos y lo primero que llegue a tu cabeza sea la lista del supermercado. Ok. Déjalo pasar. Dile a tu mente que después pensarás en ello, que lo que quieres ahora es habitar el presente. La idea es desapegarnos de lo que nos llegue.

¡Comienza a meditar!

Hay diferentes tipos de meditaciones con diferentes tipos de propósitos, pero aquí veremos lo básico que te ayudará a estar mejor y es el trabajar con la conexión con el presente.

Para meditar, solo tienes que encontrar una posición cómoda, puedes estar sentado o acostado. Luego, cierras tus ojos y empiezas a concentrarte en la respiración. Encuentra tu ritmo, el que te relaje, con la práctica lo hallarás.

Puedes acompañar esa sesión con una música que te guste. Puedes repetir algún mantra o frase, o simplemente quedarte respirando en forma consciente.

Tengo una playlist con meditaciones para principiantes en mi canal de YouTube, ¡elige la que más te guste y comienza tu práctica!

Por último, una aclaración importante. Las personas no se inician en esto meditando una hora entera. Eso es posible pero con mucha práctica. Ten objetivos alcanzables, comienza con 5 o un par de minutos al día, hasta que te vayas acostumbrando. Recuerda que tu mente y tu cuerpo no se sentirán cómodos al principio.

Cuando sientas que puedes estar ese tiempo concentrado, ve agregándole más minutos a tu rutina para ir avanzando. De esta forma, generarás un proceso amable y respetuoso que no hará que descartes totalmente esta herramienta por un «mal» día en la meditación. Incluso las personas que llevan años en esto, tienen momentos en los que les cuesta mucho concentrarse. Así que no te exijas.

En este artículo te propongo otro método para que puedas sumar a tu rutina de desconexión y relajación: conecta con la tierra a través del grounding.
Los beneficios de la meditación

Ya te he contado en qué consiste la práctica de la meditación. Así que ahora te invito a conocer 5 de sus grandiosos beneficios.

🔸1. Reduce el efecto del estrés

Entrando en un estado profundo de relajación a través de la meditación, podemos observar mejorías en nuestra salud en relación a los niveles de estrés, con su reducción. Con una práctica constante, podemos sentirnos más tranquilos. Incluso es aconsejable que si tienes un mal día, medites.

🔸2. Aumenta la capacidad de concentración y atención

Esto es porque durante la meditación, vamos a encontrarnos con nuestro cerebro intentando llamar la atención apareciendo con muchos y variados temas. El ejercicio de ir descartando aquello que no es relevante en el ahora y enfocando la energía en el presente, nos dará la capacidad de poder llevar ese aprendizaje a nuestros momentos cotidianos.

Incluso si te sientes disperso, puedes meditar unos minutos, concentrarte en el lugar en el que estás, conectar con la respiración, y luego retomar tu tarea mucho más enfocado.

🔸3. Mejora la memoria y las funciones cognitivas

Diferentes estudios han demostrado que nuestro cerebro responde de esta manera si meditamos. Además, favorece a tener un mejor criterio a la hora de tomar decisiones. Salir del estado de estrés constante hace que nuestras capacidades se desarrollen de una mejor manera.

🔸4. Promueve la aparición de pensamientos positivos

La mente empieza a estar más «limpia», cada vez con más facilidad. Estar tranquilos nos da la posibilidad de tener pensamientos alineados a ese estado, más positivos justamente, por lo que nos tomamos las situaciones de una mejor forma que cuando estamos ansiosos o estresados. Es más fácil encontrar la salida.

🔸5. Aumenta la tolerancia al dolor

Se han realizado estudios en pacientes con dolencias como fibromialgia o diagnosticados con cáncer, que a través de la meditación, han visto una mejoría notable a nivel general, en su estado de ánimo y en la reducción de la sintomatología.

Espero que este artículo te haya motivado para realizar meditaciones si es que aún no lo habías probado o quizás no le habías dedicado suficiente tiempo. Recuerda que para esta práctica, la paciencia con uno mismo es fundamental.

Como bonus track, te comparto este video cortito pero bien puntual sobre la respiración profunda, para que puedas realizarla durante tus meditaciones y relajarte al máximo.

Trabajemos juntos